Neftalí fue el segundo hijo de la concubina de Jacob, Bilhah, esclava de Raquel; y por lo tanto, hermano directo de Dan (Gen. 30, 7-8). La bendición de Jacob a Neftalí se refiere a una acto que hizo que su padre lo favoreciera: “Neftalí es una cierva en libertad: Él dará agradables palabras” (Gen 49, 21). Por medio de la imagen del ciervo corredor, Jacob alude a la velocidad en la cual Neftalí le llevó el mensaje de que su hijo José, que se temía muerto, se hallaba vivo en Egipto. Moisés lo bendice diciendo: “saciado de felicidad, lleno de la bendición de Yahvé, toma posesión del mar y de la tierra del mediodía”, (Dt 33, 23).

Su virtud es la libertad, la generosidad, y el esfuerzo. “Entrega su vida en lo alto de la campiña” (Jue 5, 18). Su piedra es la amatista. Se representa también con una cierva y el color vino claro, aunque en Al-Melek! utiliza el color naranja.